Que pinche chinga me arrimo con ustedes los hombres. Todos me joden, y me entra el remordimiento de conciencia, luego todo me deja de importar, y después ahí voy a llorar.
Flaco, ojeroso, cansado y sin ilusiones.
No me jodas, güey, no me jodas.
Tú si has lo que quieras conmigo, pero no juegues. No juegues conmigo, es lo único que te pido.
¡Dime si estás vivo, cabrón!
Pinche puto pendejo, jaja, ¡te aprovechaste de mí!
Idiota, menso, estúpido.
Que joda me arrimaste. Que joda me están arrimando todos ustedes fantasmas del pasado.
Ya vayánse, ¿por qué no se van?
Todavía no han terminado, ¿verdad?
¿Esto es? Espero en serio que esto sea.
Caricias postergadas.
¡Les quiero reclamar dónde quedo el ayer, dónde murió!
No me importa, no me importa, no me importa, ¡CHINGADOS! Que sí me importa.
Regresen. Todos. De uno en uno o todos en bola, pero regresen.
Me siento vulnerable, frágil, de cristal.
Siento que explotaré.
Que me iré a estrellar a toda velocidad contra la pared.
Aún no aprendo a aprender de mis errores. Todavía tropiezo con la misma pinche piedra una y otra vez.
Descubrí algo hoy, algo que ya sabía, pero que hoy lo verifique: Me gustan los hombres morenos, flacos pero de brazos marcados (o sino completamente escuálidos), de cabello negro negro y un poco largo y con el trasero redondito.
De darme tanto, quedaste sin nada.
Ahora estás solo y mal herido.
Y no comprendes por que me he ido.
Me entregaste el alma, soñaste mis sueños, y ahora que haces si no me olvidas.
Que haces con todo, que haces con tigo.
Que pinche joda me estoy metiendo : )
y lo mejor de todo, ¿sabes qué es? ¡Que no me importa! Me voy a meter la mejor joda de mi vida y no me importa, jaja. pura pinche hipocresía.
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